Todas podemos recordar ese momento en que deleitandonos con una situación erótica hemos descubierto que nuestros deseos nos colocaban, por decirlo de alguna manera, en una situación diferente a la esperada. Es más, descubriamos que envidiabamos con ardor a esa guapa chica que estaba haciendo el amor con ese pedazo de hombre de verdad que la estaba haciendo feliz.
Las situaciones en que nuestros deseos se han desatado y hemos envidiado hasta la extenuacion a esa afortunada chica son muy diversas.
Por ejemplo, ese momento en que vemos en primera fila como una mujer masajea una preciosa y enorme polla masculina que se ha dejado ver en todo su esplendor tras desabrocharle el vaquero y bajarle la bragueta. Casi has podido sentir la polla deslizarte entre tus manos verdad?
O ese otro momento que podría ser perfectamente continuación del anterior en el que un hermoso y musculado macho negro guia tu boca (uy perdon ,su boca, en que estaría yo pensando) a su miembro y hace que la chica engulla toda su hermosura.
O ese momento en que la chica se tumba en la cama, se agarra a la cabecera y anima al macho a que la cubra separando sensualmente las piernas lo máximo posible. El momento soy tuya.
Y que decir de esa práctica a la que nosotras nos vemos "resignadas", el sexo anal. Como nos gusta verdad? Normal, nos sirve para pensar " Si una chica puede y disfruta, yo también lo haré!!" Y gozamos viendo un buen pollon de hombre penetrar un culito tan hermoso imaginando que es el nuestro. la envidia aquí alcanza su top.
Ninguna mariquita como nosotras es capaz de satisfacer asi a una mujer corazones. Desengañaros. Lo único que nos queda entonces imaginarnos es tener la suerte de encontrar nosotras un macho que nos folle así, de ahí la envidia...y el deseo.
Besitos amores.
Todo es tan cierto!, lo que queda es entregarnos a nuestro hombre cómo las sumisas que somos
ResponderEliminaray cari, no lo digas con esa pena que es un maravilloso placer.
EliminarHey chica, que ganas de sexo!!! Como me gustaria ser tu Ama y ver como te entregas a todos esos machotes
ResponderEliminarBufff, esa imagen me ha hecho mojarme Mistress.
EliminarNada como entregarme a los hombres para darles placer a ellos y de paso a una ama que gose con ello!
ResponderEliminardi que si, de tenerlo tenrlo completo cielo.
EliminarEs sublime! Que un Hombre de verdad me cargue con toda su fuerza varonil y me meta su polla hasta el fondo de mi culito, mientras yo me cuelgo de su cuello con mis delicados brazos y mis piernas en su cintura, uff que delicia,mmmmm
ResponderEliminaray amor, el problema es que hay que encontrar un verdadero hombreton jiji..
EliminarAyyys siii, pero de eso nis encargamos nosotras con nuestra coqueteria y nuestra mariconez infinita
EliminarEste comentario ha sido eliminado por el autor.
ResponderEliminarEnvidia de la chica siempre Gerita (aunque al principio quisieramos negarnoslo). Por suerte con el tiempo y la experiencia podemos disfrutar de todas estas posturitas pero....sabes que las envidio realmente, un buen par de tetas Gerita. Por eso desde hace tiempo siempre uso sujetador, me hace sentir más femenina y creo que a mis parejas las excita más.
ResponderEliminarEn fin, de una u otra manera siempre envidiando a la chica.
Es cierto que al principio casi todas negamos el deseo de ser tomadas y nos decimos que solo nos gusta vestirnos de mujer, pero la realidad acaba por imponerse.(lo que no quita para que nos guste hacer variedad de cosas con mujeres, a mi por ejemplo comerles el coño me vuelve loquita perdida) Y el tema de las tetas...pues es un paso aún mayor que muchas acaban dando, pero cielos debeis estar muy seguras. Besitos
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